2 minutos

PARA 4 PERSONAS

La combinación de la frescura de la ensalada con la calidez de los garbanzos es sorprendente. Puedes servir este plato tal cual, con pan de pita recién hecho. Otra opción es acompañarlo de hummus o quizá de coliflor frita con tahini; ambos serían buenos complementos.

Esta ensalada también puede prepararse sin los garbanzos (entonces hay que suprimir el azúcar).

INGREDIENTES:

  • 100 g de garbanzos secos
  • 1 cucharadita de bicarbonato
  • 2 pepinos pequeños (280 g en total)
  • 2 tomates grandes (300 g en total)
  • 240 g de rábanos
  • 1 pimentón rojo sin semillas y sin la parte blanca
  • 1 cebolla roja pequeña pelada
  • 20 g de cilantro picado (hojas y tallo)
  • 15 g de perejil picado
  • 90 ml de aceite de oliva
  • Ralladura de 1 limón, más 2 cucharadas de zumo
  • 1 ½ cucharada de vinagre de Jerez
  • 1 diente de ajo majado
  • 1 cucharadita de azúcar
  • 1 cucharadita de cardamomo molido
  • 1 ½ cucharadita de pimienta de Jamaica molida
  • 1 cucharadita de comino molido
  • Yogur griego (opcional)
  • Sal marina y pimienta negra molida

PREPARACIÓN:

Deja en remojo los garbanzos secos durante toda una noche en un tazón grande lleno de agua fría con bicarbonato. Al día siguiente, escúrrelos, colócalos en una cazuela grande y cúbrelos con agua (dos veces el volumen de los garbanzos)

Lleva a ebullición y déjalos hervir durante una hora, eliminando la espuma que se vaya formando en la superficie, hasta que queden blandos. Luego escúrrelos.

Corta los pepinos, los tomates, los rábanos y el pimiento en dados de 1,5 cm; la cebolla, en dados de 5 mm. Mézclalo todo en un tazón con el cilantro y el perejil.

En un frasco o en un recipiente de cierre hermético, emulsiona 75 ml de aceite de oliva, el zumo y la ralladura de limón, el vinagre de Jerez, el ajo y el azúcar, y mézclalo todo hasta formar una vinagreta a la que debes agregarle la sal y la pimienta. Aliña la ensalada con ella y revuelve con cuidado.

Mezcla el cardamomo, la pimienta de Jamaica, el comino y un cuarto de cucharadita de sal y reparte la mezcla en una sartén grande. Añade los garbanzos de manera que queden bien cubiertos (si es necesario puede hacerse por partes). Calienta el resto del aceite de oliva en una sartén a fuego medio y rehoga los garbanzos durante 2 o 3 minutos, agitando la sartén con cuidado de vez en cuando para que no se peguen y queden bien sofritos. Mantenlos calientes.

Una posible presentación consiste en repartir la ensalada en cuatro platos, disponerla formando un gran círculo y servir los garbanzos picantes en el centro, dejando los bordes despejados. Puedes terminar el plato con una cucharada de yogur griego por encima y así la ensalada quedará más cremosa.

 

Tomado el libro de cocina Jerusalén por Yotam Ottolenghi, 2012.